Hoy en día el Paramotor sirve para experimentar el vuelo de diferentes maneras de acorde a 4 variantes:
1) Vuelo Recreativo – Pilotos interesados en volar con libertad de desplazamiento en cualquier momento sin un propósito u objetivo.
2) Vuelo Acrobático – Pilotos interesados en volar con maniobras giratorias de alta dificultad que generen una sensación de logro y control para el piloto , y a su vez que haya un público espectador que pueda disfrutar el show.
3) Vuelo de Travesía XC – Pilotos interesados en explorar regiones nuevas y conocidas desde diferentes alturas, con un énfasis en recorrer largas distancias para aprovechar la ventana de vuelo que el tanque de gasolina permita. En esta variante, el Piloto escoge si quiere volar sin turbulencia o si quiere aprovechar las corrientes termales para realizar trayectos de mayor rendimiento e intensidad.
4) Vuelo de Competencia – Pilotos que vuelan en competencias deportivas como el Slalom o Carreras de Distancia XC.
Alejandro actualmente recomienda los motores de la marca Polini para ganar eficiencia y rendimiento – pudiendo experimentar menores vibraciones al tener instalado un árbol de balanceo junto a la biela neutralizando así las fuerzas resultantes de la operación del motor.
Además, esta instalación ayuda en cuestiones de soporte y facilita la identificación de piezas del motor.
“En el Thor 202 encuentro el motor más deleitable para despegar y volar a pie, pudiendo ser igualado por el Thor 303 que tiene demasiada potencia y brinda una sensación fisica muy sútil. Lo único que el 202 no tiene es la marcha eléctrica para el encendido pero se justifica al llevar un propósito de la máxima potencia con el menor peso posible.
Por ello , el Thor 130 pudiera ser la opción más conveniente para los pilotos que van comenzando, ya que es muy ligero -con 21 caballos de fuerza y marcha eléctrica – además de una carga automática de batería a 40W, suficiente para llevar encendidos los focos de seguridad durante todo el tiempo de vuelo.”
